Ayer me sorprendí cuando vi como mucha gente comenzaba a publicar un mensaje con gran enfado e indignación por la próxima modificación de las condiciones del servicio que ha anunciado la empresa Facebook. Se escandalizaban porque según comentaban, ahora las condiciones incluían cláusulas que indicaban explícitamente que se iba a recabar información personal de los usuarios.

Según reza el artículo 6 del código civil Español, el desconocimiento de una norma no exime de su cumplimiento (Ignorantia juris non excusat), y cuando alguien se escandaliza por algo así, yo le pregunto ¿leíste las condiciones originales cuando diste de alta tu perfil social? En España, toda empresa física o virtual, que recabe información y datos personales como pueden ser datos de registro, está obligada a asegurar el soporte y a registrarlo en cumplimiento de la Ley de protección de datos, pero ese soporte (fichero o base de datos) es propiedad de la empresa en cuestión aunque el usuario tiene los derechos de modificación y eliminación o cancelación si así lo desea.

Está claro que nadie da nada gratis y cuando una empresa como Facebook, Twitter, Google o cualquier otra monta una infraestructura de envergadura de nivel mundial no es porque sus ingenieros se aburran o porque quieran hacerse famosos por un servicio tal, lo hacen por lo mismo que cualquier mortal se levanta cada mañana y acude a su puesto de trabajo, para enriquecerse económicamente.

Desde sus orígenes, todas las empresas nombradas han sufragado sus gastos mostrando a sus usuarios publicidad de empresas asociadas que són las que realmente pagan por el servicio, lo que ahora hace Facebook como se puede leer en las notificaciones que han enviado a todos sus usuarios (o en las actualizaciones publicadas en la web), es actualizar sus políticas de privacidad para poder tener algo más de control sobre que tipo de información será publicada y utilizada para poder mostrarnos una publicidad más acorde con nuestros gustos y búsquedas y que entrará en vigor el próximo 1 de Enero de 2015.

Estas actualizaciones no són fruto de un intento de actualización de contenidos, sino que es una obligación legal al implementar y para adecuar sus servicios a las nuevas leyes vigentes en diversos territorios, sobretodo Europeos, así como la anticipación a los nuevos servicios en materia de ventas online que se está ya probando en Estados Unidos y que próximamente puede llegar hasta nuestros países.

No es ninguna novedad que según avanzan, se crean o modifican legislaciones, las empresas que operan en el territorio afectado deben adecuarse para cumplir las nuevas normativas, como tuvimos que hacer todos los desarrolladores web cuando se creó la política de gestión de cookies que nos obligaba a informar a los usuarios que una web haría uso de ellas, indicando para qué se utilizaban, qué contenían y cómo se eliminaban, tal y como les explicamos en posts anteriores, ni el mismísimo Google se escapa de cumplir las nuevas leyes, que ya hizo a principios de año la misma operación con las mismas críticas y sorpresa de sus usuarios (algo que personalmente no entiendo...).

En definitiva, lo que les aconsejamos desde Técnicos Web es leer con detenimiento todas las condiciones contractuales cuando quieran registrarse o darse de alta en algún servicio (on-line o no) donde se le expondrán sus derechos, deberes y obligaciones, para evitarse después alguna sorpresa porque no sabía que eso era así...y si no están de acuerdo con las nuevas políticas de cualquier servicio siempre pueden eliminar su cuenta y dejar de usarlo.

Y vosotros ¿leéis las condiciones del servicio cuando os registráis en alguna web?